Eustrés vs. Distress: Cómo el Estrés Positivo y Negativo Afectan tu Desempeño.

En el mundo del liderazgo, el estrés es tan inevitable como los correos electrónicos sin leer. Sin embargo, no todo el estrés es igual. Mientras que el eustrés puede ser un impulso positivo, el distress es el enemigo silencioso que todos tememos. En este artículo, vamos a explorar las diferencias neurocientíficas entre estos dos tipos de estrés y cómo puedes, como líder, convertir el estrés en un aliado en lugar de un obstáculo.

Tabla de contenidos

El Estrés: Un Mal Necesario con Dos Caras

El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante desafíos o amenazas. Según un artículo publicado en la Harvard Business Review, el estrés no siempre es malo. De hecho, en dosis adecuadas, puede mejorar el enfoque, la motivación y la resistencia​. Pero, ¿qué determina si el estrés nos impulsa hacia adelante o nos derrumba?

Eustrés: El Estrés Positivo

El eustrés es la versión «buena» del estrés. Es el tipo de tensión que sientes cuando enfrentas un desafío emocionante y manejable. Neurocientíficamente hablando, el eustrés activa la corteza prefrontal, que es responsable de la toma de decisiones y la planificación. Además, se produce una liberación moderada de adrenalina y noradrenalina, lo que mejora la concentración y el rendimiento sin causar efectos negativos​.

El sistema de recompensa, incluyendo el núcleo accumbens, también se activa durante el eustrés, generando sensaciones de logro y satisfacción. Este tipo de estrés también estimula el hipocampo, lo que facilita el aprendizaje y la memoria, y te prepara para resolver problemas de manera más efectiva​.

Distress: El Estrés Negativo

  • Por otro lado, el distress es el tipo de estrés que queremos evitar a toda costa. Cuando las demandas superan nuestra capacidad de afrontarlas, la amígdala se activa en exceso, generando respuestas de miedo y ansiedad. En situaciones de distress, la corteza prefrontal reduce su actividad, dificultando la toma de decisiones y la regulación emocional.

    El distress también aumenta los niveles de cortisol, una hormona que, cuando se eleva crónicamente, puede dañar la memoria, la capacidad cognitiva, e incluso el sistema inmunológico​. Según un estudio en la American Journal of Psychiatry, el distress crónico está estrechamente relacionado con trastornos como la depresión y la ansiedad​.

Cómo Convertir el Estrés en Eustrés

Aquí es donde entra en juego el Método Sinapsis. A través de técnicas avanzadas de neurociencia y neurofeedback, ayudo a líderes como tú a transformar el distress en eustrés. El entrenamiento cerebral con neurofeedback permite visualizar y regular la actividad cerebral en tiempo real, ayudándote a fortalecer las conexiones neuronales que promueven el eustrés y minimizar las que contribuyen al distress​.

Referencias y Lecturas Recomendadas

  • Harvard Business Review: Artículos sobre el impacto del estrés en el rendimiento laboral.

  • American Journal of Psychiatry: Estudios sobre los efectos del cortisol en la salud mental.

  • Neuroscience & Biobehavioral Reviews: Revisión de la activación de la corteza prefrontal y el sistema de recompensa durante el eustrés.

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